Recordando viejos lugares...

Paseaba por las calles de forks sin un destino fijo, recordaba la mayoria de esas calles. De pequeña, daba paseos por alli de vez en cuando con los chicos de la reserva.

Estaba algo trastornada, aunque ya sabia lo que era, no podia aceptarlo asi como asi... ¡Ser una loba no era algo que le pasase a la gente muy a menudo! No tenia ni idea de como reaccionar a aquello...

Mientras caminaba, paso al lado de un parquecito, ya era tarde asi que no habia niños. Camino asta los columpios y se sento sonriendo.

-Ser pequeño es tan facil...

Como muchas tardes, casi entrando a la noche, decidí dar un paseo por el parque de Forks. Me gustaba hacer aquello, me relajaba y en parte me hacía sentir más humana.

Los últimos días habían sido bastante agotadores, con todo lo de Marla... Aún me preocupaba aquello. Suspiré y seguí caminando por el borde del parque.

Fue entonces cuando un olor peculiar me hizo despertar de mi ensimismamiento. Levanté la cabeza del suelo y fruncí el ceño. ¿Era olor a...licántropo? Miré a todas partes, pero solo vi a una chica sentada en un columpio. ¿También había mujeres licántropo? No lo sabía, nunca había conocido a uno.

Me acerqué con curiosidad a la chica.

-Hola -dije en voz baja ya que parecía pensativa.